Atención señores, les presento mi nuevo iPhone:

<img style=”display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;” src=”http://bp3.blogger.com/_PnWHf0Wv0BI/RaVWeQf7MEI/AAAAAAAAAE4/qo-bAfoMDWw/s1600/Imagen+1.png” border=”0” alt=”“id=”BLOGGER_PHOTO_ID_5018512437599219778” /> Es un puto pepino, es enorme de la ostia, la verdad (otra foto con una regla de 15cm, no os perdáis las anotaciones). Se trata de una Newton MessagePad 120, un modelo que apareció en Junio del ‘96 y dejó de fabricarse en Abril del ‘97, todo un clasicote y un fiasco rotundo de ventas. A mi me costó 40 euros en ebay, al que lo compró le debió costar (comparativamente) como un iPhone, es decir, un ojo de la cara.

A parte de ser enorme, el sistema operativo es una chusta (debe ser la versión newton 1.3) y la pantalla está ralladísima, cosa que ponían en ebay pero la verdad me importa bastante poco, lo he comprado porque me hacía gracia, por verlo y hacerme una idea de como era y para apuntar alguna que otra cosilla. Además por lo que he leído en wikipedia hay verdaderos freaks del Newton que se han currado drivers para todo tipo de tarjetas de expansión PCMCIA, ya veremos si más adelante me pongo a investigar como está el tema. De momento a trastear un poco y a ver qué se le puede hacer, algo positivo que me ha sorprendido es el sistema de reconocimiento de escritura por ejemplo, que ya lo querrían muchas PDAs actuales para sí.

El Newton fue un fracaso de ventas porque era muy caro, muy grande y permitía poca flexibilidad sobretodo al principio los primeros modelos (como éste). Hay gente que dice que el iPhones será otro fracaso rotundo (los más pesimistas), yo digo que el iPhone no se puede comparar a éste, ya que son dos cosas distintas, encaradas a sectores distintos y por tanto casi incomparables. Sinceramente no creo que el iPhone sea un éxito rotundo como lo fué el iPod, pero tampoco será como el Newton, eso es seguro.